La idea de la presente entrevista a Mireia Nieto nace de nuestro encuentro con su interesante libro «Nuevas genealogías«, con el que descubrimos una renovada mirada al árbol genealógico, tan actual, profunda, clara y dinámica como su propia autora. Pero dejemos que ella misma se presente…
C&P: Carmen y Paco
MN: Mireia Nieto
C&P- Nadie mejor que tu misma para presentarte. ¿Quién es hoy Mireia Nieto?
MN-La pregunta del millón, a pesar de eso, creo que se puede responder. Soy Mireia, múltiple, cíclica, poliédrica y en el plano profesional puedo resumirlo así: soy genealogista especializada en historia familiar contemporánea y transgeneracional.
C&P-¿Qué fue lo que despertó en ti la pasión por esta disciplina?
MN-Me interesé por mi árbol genealógico cuando comprendí que había una parte de mí que no era exactamente mía, que pertenecía a otros, a personas que estaban muertas y que incluso no había llegado a conocer. Me dije a mi misma que no podía dejar de investigarlo. Leí y leí, estudié y estudié para saber en qué consistía la genealogía clásica y a la vez comprender qué era el transgeneracional.
C&P: En las últimas décadas proliferan nuevos vocablos con esta misma raíz: psicogenealogía, metagenealogía, etc. ¿Dónde te sitúas? ¿Qué entiendes por “genealogía”? ¿Cuál es tu enfoque? ¿Qué es lo que te gustaría aportar?
MN-Me considero genealogista porque para mí es muy importante investigar la historia familiar de manera clásica, preguntando a testigos y yendo a archivos y registros a conseguir documentos que prueben la filiación y otras relaciones de parentesco.
Sí, hay muchas corrientes que trabajan el transgeneracional: los pioneros fueron Anne Ancelin Shutzenberger con la psicogenealogía, Alejandro Jodorwsky bajo el mismo nombre que años más tarde cambió junto a Marianne Costa por metagenealogía y Bert Hellinger con las constelaciones familiares. ¡Los tres superan los 80 años en la actualidad!
Llevo desde 2013 ofreciendo un nuevo enfoque sobre la genealogía que aúna investigación y transgeneracional, lo he llamado genealogía viva y los pilares de mi trabajo son análisis, reflexión y creatividad. Aporto aire fresco a mi profesión.
C&P-¿De qué fuentes bebiste, qué maestros te enseñaron, qué experiencias te guiaron para llegar a ser una experta en este área de conocimiento?
MN-Soy experta en genealogía y archivos por la Universidad de Córdoba y mi visión del transgeneracional recoge las experiencias y propuestas de la epigénetica, la antropología, la ficción literaria y cinematográfica y de autores como Salomon Sellam, Jodorowsky, Eva Bach, Joan Garriga… No tengo maestros, no sigo dogmas, me inspira la misma vida.
C&P-¿Crees que nuestras raíces son las bases sobre las que nos apoyamos para salir hacia el mundo?
MN-Somos lo que otros fueron, esa es la base sobre la que construimos nuestro ego. Estamos condicionados por nuestra genética y nuestra crianza pero no condenados a cumplir un destino prefijado.
C&P-¿Todo el mundo debería conocer su árbol genealógico? ¿por dónde comenzar?
MN-Sí, si tiene tiempo y ganas sin duda debería ponerse a reconstruir su árbol genealógico. Tiene que comenzar por él mismo, es muy importante comenzar una genealogía preguntándose «Qué sé yo de mi familia» y ser sincero porque no podemos pretender que vivos y muertos compartan su intimidad sin hacerlo nosotros antes.
C&P-Háblanos de las formas en que compartes todo lo que has aprendido sobre genealogía: blog, talleres, artículos, libros…
MN-Comencé escribiendo un blog en 2013, pronto empecé a impartir charlas y talleres presenciales en Barcelona y otros lugares, escribí mi primer libro a finales de 2014 «Nuevas genealogías. Cómo abordar el árbol genealógico en el siglo XXI», http://tataranietos.com/nuevas-genealogias/, sobre diversidad familiar y reproducción asistida y este 2015 creé de la nada dos cursos on-line: uno para aprender a hacer el árbol genealógico: Genealogía para principiantes, http://tataranietos.com/curso-de-genealogia-on-line/, y otro para entenderlo: Mi árbol y yo, http://tataranietos.com/curso-on-line-mi-arbol-y-yo/. Sigo investigando para otros, ya estoy escribiendo mi segundo libro y trabajando en otros proyectos. ¡No paro!
C&P- Entendemos que hay un árbol genealógico “oficial” y otro real, vivido y sentido. ¿Son tan diferentes? ¿Por qué es tan importante ser conscientes de los miembros que realmente conforman nuestro árbol familiar?
MN-Puede existir un árbol oficial y otro íntimo, normalmente solo creamos uno con sus errores, omisiones, secretos y mentiras, algunas son escogidas, otras provienen de lo que otras personas y documentos nos han contado. Sostengo que cada persona puede crear si se lo propone un árbol único y flexible que además puede variar a lo largo de su vida.
Hay personas que pueden ser transparentes y explicar su intimidad a sus familiares y otros no, les puede costar un precio demasiado alto, esas personas no podrán tener un árbol genealógico que les sea útil, será algo que les estorbe.
Si pudiéramos incluir en nuestra genealogía a todas las personas que nos han ayudado a llegar hasta aquí sería fantástico, si seguimos creyendo que genealogía es sangre y alianzas matrimoniales nos perdemos su riqueza.
C&P- ¿Cómo explicas a un genealogista clásico que hay miembros de la familia que no quedan inscritos en los registros civiles?
MN-Trato de que mis compañeros amplíen sus miras pero no parecen muy entusiasmados con mis explicaciones, siguen empeñados en hablar de linajes, estirpes y sangre. No quieren ni plantearse que los donantes de gametos no quedan registrados en ninguna partida de nacimiento, en 2014 un 3% de criaturas nacieron gracias a las técnicas de reproducción asistida en España, no todos nacieron gracias a donación de esperma u óvulos pero muchos sí y una parte de ellos no serán informados de esta circunstancia por sus padres a lo largo de su vida.
C&P- Desde tu punto de vista, ¿hacia dónde camina la moderna genealogía del siglo XXI? ¿Cuál es tu mejor fantasía sobre su futuro?
MN-La genealogía y las disciplinas que aborden el transgeneracional se modernizarán sí o sí para contemplar todo tipo de relaciones afectivas y sexuales. Ojalá los profesionales sean más positivos respecto a los modelos de familias que se salen de la norma biparental y heterosexual y todos nos relaciones con más conciencia con nuestros familiares y antepasados.