
Vivamos o no en pareja, es mejor convenir que cualquier síntoma físico es una oportunidad para hacernos conscientes de que hay un área en nuestra vida que necesita atención y algún cambio.
La garganta, junto con las cuerdas vocales, es un canal de expresión y creatividad. A través de ella recibimos lo que nos alimenta y nos hace crecer. Nos duele cuando nos hemos sentido heridos emocionalmente y no hemos sido capaces de pronunciar ni una palabra; hemos tragado lo que pensábamos y nuestra irritación se ha quedado instalada.
Muchos problemas de garganta responden a una incapacidad de hacernos valer y de pedir lo que necesitamos. ¿Creemos que cortar el órgano afectado, extirpando las amígdalas, servirá para dejar de tener miedo, para dejar de reprimir nuestras emociones y creatividad?
Muchas de las dificultades con la garganta nos hacen tomar conciencia de que no podemos seguir tragando carros y carretas.
Nos quedamos afónicos a consecuencia de no poder expresar lo que pensamos o sentimos, por miedo a las consecuencias.
Parejas Sin Fin