¿Podríamos calificar al cerebro como un universo en miniatura?
De la siguiente forma, tan ingeniosa, se define el funcionamiento del cerebro en el libro Entra en tu cerebro, escrito por Sam Wang y Sandra Aamodt.
“Es como un restaurante chino en el que no queda ni una mesa libre: es caótico, falta espacio y la gente corretea de un lado para otro sin ningún propósito aparente; pero, de alguna manera, al final todo se acaba haciendo como es debido”.
Sandra: El cerebro contiene una enorme cantidad de información. Quizá no la suficiente como para considerarlo un universo, pero desde luego, suficiente para mí.