Podemos inspirarnos en Daniel Siegel y David Rock, expertos mundiales en el cerebro y en la consultoría organizativa respectivamente. Ellos crearon el llamado “plato de la mente sana”, un modelo sencillo para recordar las 7 actividades esenciales diarias que son necesarias para optimizar la materia cerebral y crear equilibrio y bienestar.
Estas son:
TIEMPO DE CONCENTRACIÓN
TIEMPO DE JUEGO
TIEMPO DE RELACIÓN
TIEMPO FÍSICO
TIEMPO DE INTERIORIZACIÓN
TIEMPO DE INACTIVIDAD
TIEMPO DE SUEÑO
Te propongo que reflexiones sobre las cuestiones siguientes, con el fin de autoevaluar cuán equilibrado está tu horario.
¿Cuánto tiempo dedicas a concentrarte en tareas teniendo en cuenta objetivos? ¿Asumes desafíos, nuevos retos?
¿Te permites cada día un espacio para disfrutar de actividades novedosas que despierten tu creatividad y tu espontaneidad?
¿Dedicas tiempo a relacionarte especialmente con personas, pero también animales y con la naturaleza que te rodea?
¿Tienes cada día un rato para hacer ejercicio y cuidar tu cuerpo?
¿En algún momento del día te quedas en silencio, reflexionando, concentrado en tus sensaciones físicas, imágenes, sentimientos y pensamientos?
¿Dejas alguna vez que tu mente vague, relajado, sin estar concentrado en nada concreto?
¿Descansas cada noche todo el tiempo que necesitas?
Tras el ejercicio, te invito a que tomes tu agenda de la semana y hagas anotaciones con las actividades que estimes que están más desatendidas. Los hábitos tienen tanto poder como la fuerza de la inercia, pero más fuerte llega a ser el compromiso con tu propio equilibrio mental, físico y emocional.