
La insatisfacción está en la base de cualquier adicción.
Una pareja de fumadores adictos reconocieron que sus cuerpos estaban presos y no podían salir de la cárcel del tabaco sin una tremenda fuerza de voluntad. Lo más útil consistió en descubrir y comprender los motivos por los que entraron en la adicción. ¡Trabajo que no todos están dispuestos a emprender!
Motivos puede haber muchos, pero para dejar de fumar primero hay que tomar la decisión y después ser capaces de recordarla continuamente. Cuando se desea transformar un comportamiento compulsivo los actos psicomágicos (teatrales) pueden ayudar, pero para que funcionen en toda su potencia primero hay que ajustarlos a la realidad concreta del que desea dejarlo. La receta que en una ocasión funcionó para una persona no tiene por qué ser la más adecuada para otra. No todos somos exactamente iguales.
En el tema de las adicciones lo importante es captar el mensaje de que somos libres y que por tanto podemos abandonar cualquier hábito.
Si ya has tomado la decisión de dejar de fumar, nada ni nadie podrá impedir que olvides el tabaco para siempre.
Imagen: Malkowsky