En uno de los pasajes del libro “Encuentros con Monroe” de Kingsley L. Dennis, un maestro explica lo siguiente:
-Mire joven, lo que sucede en esta realidad es la Inteligencia tratando de encontrarse a sí misma, ya sea mediante miedo, caos y oposición, o bien unidad y compasión. Son todos diversos aspectos del mismo juego que se está llevando a cabo.
El joven interrumpió la explicación para preguntar: ¿En esta realidad solo somos» jugadores»?
-Sí. Por ese motivo necesita ser un jugador consciente, lo que significa situarse en el campo de juego en lugar de mantenerse sumisamente al margen. ¡Sea un puente y sea un jugador!
El joven volvió a preguntar: No me queda claro lo de ser un jugador…¿Podría explicarlo con las palabras de otro autor?
-Dice David Topí: “La inteligencia es el producto de la consciencia. Si deseas ser más inteligente, debes ser más consciente, si deseas vivir más la vida, debes esforzarte por “existir” en ella.
¿Acaso no existo en mi vida?, insistió nuevamente el joven
-“Me refiero a que uno no puede ser un actor pasivo de sus propios acontecimientos sino que debe tomar el control de ellos a través del propósito de existir conscientemente en cada momento”
………
Cuando dejamos de quejarnos por lo que nos está pasando y lo entendemos, encendemos una poderosa luz en nuestro interior. En ese preciso instante lo aparentemente inconexo empieza a cobrar sentido. “Existir”, además de sobrevivir en este planeta, supone aprender e integrar las experiencias que nos suceden. Queda poca duda de que el aprendizaje nos necesita despiertos y conscientes en todo momento.
