Un gran arquitecto proyectó una catedral de cristal. Los problemas técnicos que supusieron tal desafío debidos a la enorme fragilidad del material empleado, no eran nada comparados con el malestar que generó entre los feligreses. Éstos se sentían observados desde el exterior y en continuo peligro, ya que cualquier rotura podía resultar fatal.
Parece ser que el constructor pretendía que nadie buscara la verdad en el templo. Por ese motivo, lo diseñó como un lugar frágil y peligroso. Sin embargo, un par de siglos después, el lugar se convirtió en cuna de la santidad y en el más visitado del mundo.
Pintores que fueron insultados por una sociedad que nunca comprendió su técnica, son considerados genios del arte cien años después.
El método es importante: Un joven escribió una carta diaria a su amada durante años, y ella se casó con el cartero que se las hacía llegar.
Almanaque Sanador