¿Crees en los mensajes de los sueños?
-Sí, ¿cómo no iba a creer?…
La casa de tu infancia arde en llamas, un incendio provocado por tus propios ancestros.
-Lo cierto es que primero se mostraron, llamaron mi atención cuando estaba comiendo unas uvas…
Y con una tranquilidad asombrosa iniciaron el incendio sin darte ninguna explicación.
-Si nacieron y vivieron en esa casa, ¿que puede impulsarlos a quemarla? No parece tener sentido.
No te confundas, tus ancestros no están ya en este plano. Aparecen en tus sueños porque tú mismo los has puesto allí para acceder a la respuesta que andas buscando.
-Lo primero que pensé es que quemar es purificar, limpiar. Pero frente a ellos no me sentía muy tranquilo. Por un instante dudé entre quedarme a apagar el fuego o salir de aquella casa a toda velocidad.
Dudaste entre mantener las cosas como estaban o aceptar las transformaciones, siempre inevitables, que te proponían. La casa también es una dimensión de uno mismo… en este caso “la casa de la infancia” ¿qué es por tanto lo que no aceptas transformar en tu interior?
-Decidí salir, a pesar de que sabía que nadie lo entendería, aceptando que era la hora del fuego (de la pasión, la creación, “de quemar las naves”, …)
El universo onírico es una ayuda inestimable
Gracias Plano Sin Fin. Justo esta noche he visto la casa de mi infancia, frecuente y que una vez quemé en sueño, convertida en unas viñetas de Moebius.