Categoría : Arte

903157_484525784988944_1961605883_o

Sobre el odio a la joyería

Rafael Alemany, uno de nuestros artistas colaboradores y amigo personal, recibió un mensaje que decía “Odio la joyería”. Traemos aquí su respuesta:

“He recibido, a través de la página, el escueto mensaje de un desconocido. Literalmente “Odio la joyería”. Estas expresiones tan breves, tienen algo de enigmático, de oráculo de divinidad que detesta a los hombres, como Apolo. Los humanos por el contrario damos explicaciones, estamos obligadas a darlas, en nuestra intimidad, con los seres próximos y como no, cuando nuestro trabajo se hace público, seamos artistas, profesores, políticos, psicólogos…

Más que pensar sobre la oportunidad de este tipo de mensajes en las redes sociales, me gustaría utilizarlo como excusa para reflexionar sobre lo “odioso” en joyería.

Evidentemente, al trabajar por placer en ella, yo no la odio. Tampoco la amo, una emoción que prefiero reservar para las personas. El amor a los objetos debería derivar de su capacidad de conexión (profunda, no virtual) con uno mismo y con nuestros semejantes. Y la joyería lo hace con más facilidad que otras disciplinas de ese mundo de lo objetual.

Los seres humanos tenemos libertad para considerar odioso todo lo que nos rodea. Así, dependiendo de nuestra experiencia, podemos proyectar nuestro odio sobre el mar, la luna, nuestra vecina, el olor de la pintura, etc. sabiendo que para otros pueden ser maravillas. No pretendo debatir sobre esto, por exceso de información. La frase “sobre gustos no hay nada escrito” es un error muy divulgado, ignora que tenemos al menos 2500 años de historia de la Filosofía. Desde la estética en general, a cientos de libros dedicados propiamente al tema del “gusto” a partir del siglo XVIII. Es cierto, que en cuestión de gusto, son muchas las personas que ya no se identifican con la joyería que suelen encontrar en los comercios. La industria se ha mostrado mucho tiempo reacia a los cambios, lejos de la evolución de las tendencias y de la moda, menospreciando el trabajo de muchos artistas, con tiendas de una uniformidad en su oferta que va en contra de uno de los objetivos del diseño de joyas, la proyección de una imagen diferenciadora. Toda una política que ha ido llevando a las joyería de barrio al cierre, a parte de otras causas más graves, claro. Pero estos serían temas para otras reflexiones.

Quizá el odio puede ser, no a la joyería, sino al ornamento en general. Adolf Loos, uno de los principales promotores de la arquitectura moderna y precursor de la posmoderna, titulaba uno de sus artículos más divulgados “Ornamento y delito”. Defendía que el hombre moderno ya no necesitaba de los ornamentos, su mundo ya no era mágico-simbólico, como el de las culturas arcaicas. Escenificaba su rechazo con el tatuaje, que consideraba sólo apto para delincuentes y primitivos. Pero a estas alturas, cualquier que se adentre mínimamente en la historia del arte sabe que: 1) La Historia del Arte se constituye como tal disciplina independiente a principios del siglo XX en Viena , teniendo uno de sus pilares en el estudio de lo ornamental con Alois Riegl (“Arte industrial tardo-romano”, “Problemas de estilo”) 2) La aceptación del arte moderno, hubiera sido imposible sin trabajos teóricos que lo justificaran. El triunfo de la abstracción entre los especialistas va acompañado del éxito de textos como los citados o el de “Abstracción y naturaleza”, de Worringer, también, por cierto, sobre la ornamentación. Incluso los partidarios de un diseño minimalista defendido por Loos, utilizan sus dispositivos de alta tecnología como fetiches. El rechazo a la joyería por el ornamento estaría ignorando un momento fundamental de la Historia del Arte, como se fraguó la aceptación del arte contemporáneo.

Pero la joyería puede ser odiosa. Uno de los odios viene por los materiales que ha empleado tradicionalmente. Las explotaciones de piedras preciosas o del oro explotan a personas como un recurso más. Son elementos de muerte. Tragedias como la de los buscadores del grupo Donner en Klondike, que inspiró a Chaplin “La quimera del oro” (comerse los zapatos, el canibalismo y la muerte no fueron invención del genial Charlot) se repiten. Hoy podemos encontrar buscadores de oro como los de entonces. Los que utilizamos estos materiales, tenemos la obligación de asegurarnos de la procedencia y manipulación de los mismos. Una preocupación por todo el ecosistema que debe ser compartida por los compradores. El mundo de la joyería está haciendo un serio esfuerzo en ese sentido, desde la legislación, al uso cada vez más frecuente de todo tipo de materiales, pasando por una interesada limpieza de una imagen de marca (como en cualquier otro sector). Este odio lo justifico, pero no todos somos iguales.

Ya he sugerido, como la joyería, desde tiempos inmemoriales, tiene una serie de usos muy complejos. Alguna gente compra joyas como inversión. El que odia esto, odia al mercado y supongo que su odio se podría extender entonces a todo tipo de coleccionismo ( la atracción por la rareza de las cosas, su antigüedad, su historia) . El que esté libre de pecado, que tire la primera piedra.

Pero también hay personas que compran las joyas para ponérselas o para regalarlas, para usarlas a diario o en momentos especiales. Hay joyas para el recuerdo ( de un viaje, de un acontecimiento, de una persona). Otras simplemente son funcionales, para que sirvan para cerrar los puños de una camisa, enganchar una tela. Artísticas, que declaran tu interés por Dalí, Picasso, Calder, Barceló. Por transmitir una imagen contemporánea, o arcaica. Joyas tradicionales, vinculadas a lo religioso o a determinadas ceremonias, para que le recuerden a las personas la importancia de hablar con su interior con asiduidad, como en un mantra. Proyectando una imagen personal ( de autoexpresión, comunicación, erotismo, belleza, status social, diversión, moda).

Otras veces una pública. La joya es una forma de manifestar su profesión, su centro de estudios, etc. Como el emblema que luce un Ingeniero, el estudiante de un Colegio de prestigio, una organización, un cargo, una posición, un premio, una recompensa, etc. Una importante bióloga marina sonreía al enseñar su colección de broches con formas de criaturas del océano, especialmente con aquellas que están en peligro de extinción. un jugador de baloncesto de la selección española, lleva con orgullo un colgante con la silueta del continente africano, reivindicando sus raíces.

Yo no sé lo que mi emisario puede odiar, pero la joyería quizá sea un buen objeto para odiar, porque permite odiar todo lo humano.”

Rafael Alemany

Imagen- Obra del autor que él describe así: ”Castor y Pólux”, gemelos, bronce , 2013. Los gemelos Castor y Pólux se intercambian su presencia en el mundo de los vivos y el Hades. Personajes en tránsito. La dualidad de la cultura occidental, Cuerpo/ Ánima, Profano/ Sagrado, también presentes en el objeto joya.

Grupo de artistas colaboradores

Lista

A

Absynthia // Adriana García // Agustín Bucari 1 // Agustín Bucari 2 // Alejandro Wasilieu // Alette Loría // Alfonso Vargas // Altayre // Amanda Junie // Amatista // Ana María González Ibarra // Ana María Monfort // Antuart

B

Beatriz Astudillo Meléndez // Beatriz Pérez // Benjamín Vélez //Bernarda Enriquez // Blink gdl //

C

Camila Franco 1// Camila Franco 2 // Cappry Leiva // Carlos // Carlos Sánchez Pereyra // Carmen Calabaza // Carolina Vallecillos // Caro Ponce de León // Carmen Alejandra Baeza // Catalina Bodoque // Caterina // Cecilia Martínez Quintero // Centro místico // Cope // Cristina Polop //

D

Dani Jiménez // David García // David Sigma // Dei // Delia Panpahoy // Denice Flores Caballero (Pinkdenice) // Denice Marroquín Fuentes // Diana Becker del Solar // Diana Buitrago // Diego Juan // Dulce Velázquez //

E

// Eclesiastika 1 // Eclesiastika 2 //Eden González // Eduardo Martínez (Emarso) // Else Fetherhead // Érica //

F

Felipe Smides // Filomena // Foi Jiménez // Francisco Ciceri // Francisco Sanjuan García //

G

Gabriel Fix // Gloria Rivera // Gonzalo Golpe // Gön cHan¡ //

H

Helena Nares // Helga

I

Inti García // Iro S // Itzel Figueiras // Ivan Soria // Ivon Lara //

J

Javi Moreno // Janu // Javier Vargas // Jesús Espinosa // Jesús Ortega Fraile // José Antonio Bañuelos // Joselyn // José Manuel Martínez // José Revilla // Juan Arenas // Juan Carlos Cáceres // Juan Muz // JuDuq // Juliana Cuervo //

K

Kalinka Prates // Karin Wimmer // Kito Muñoz // Koldo Barroso //

L

Lau Laura // Laura Cabra // Lêa // Leonardo // Leopoldo Tauffenbach // Letiliterggi //Licha // Lina Marín // Lola // Lolayup // Loreto Contreras // Louis Arce // Lucas Toro // Lucky //Lucymaga // Luís Bermudo // Luis Enrique Sepúlveda //Lunatique // Lux //

M

Maite Sanz de Galdeano // Malkowsky // Mamen Mata // Manny Jaef //Manuel Reyes// María Martí 1// María Martí 2 // Maríade Rodríguez Lorenzo // Mariana Szulman // Mariángela Aponte Núñez // Mariano // Maricarmen // Martha Reyes // Meli Medrano // Mhartyn // Mica Foulon // Miguelius // Monoperro //

N

N. A. Encinoso Alonso // Nasser Malek // Natagrafica // Nicolás Rosenfeld

Olga Caballos

P

Pablo Alles // Patricia Moreno //Patricio Villarroel // Patricio Kunz // Paula Parducz // Paula Zolano // Paz // Pedro Rubio // Pilar San Juan //

R

Rafael Alemañ // Raydaytona // Rellase // Roberto Vega // Rodrigo // Romanie //

S

Sandra Amezcua Quintero // Sandra Garza // Sara Castro // Silvia Lew // Sergi Cànovas // Soledad nina_yol // Sonia Escuredo //

T

Tomás Santana Cesar // Thomas Simoon 1// Thomas Simon 2 //

V

Valentina // Vero Colodro // Verónica García // Vicky // VonnyVal //

W

Wintia

Z

Zulymagina

PARTICIPA