Alejandro Jodorowsky da un acto psicomágico para cambiar de nombre.

Alejandro Jodorowsky da un acto psicomágico para cambiar de nombre.

EX-PEDRO PREGUNTA:

Querido amigo, querría saber si puedes ayudarme. La cosa es muy simple: no tengo relaciones con mis padres, no me conocen, no se interesan por lo que hago, y, además, quiero cambiarme nombre, porque me dieron el de mi abuelo paterno, Pedro Pierotti. Siento que necesito renacer. Por favor, ayúdame. Un abrazo, el que hasta hoy se llamó Pedro.

ALEJANDRO RESPONDE.

Querido ex-Pedro, cambiarte de nombre es una buena manera de acabar con tu identificación a la etiqueta negativa que tus padres te pegaron en el alma cuando naciste. No sólo llevas encima un Pedro, sino también un Pierotti, que significa, en italiano, «Hijo de Pedro». Lo que quiere decir que desde hace incontables generaciones nadie tiene la libertad de ser lo que verdaderamente es, obligado como está por su apellido a imitar a un arcaico patriarca fundador. Sin embargo tienes que darte cuenta que, lo hayan querido tus progenitores o no, a través de ellos se ejerció la voluntad del Universo para que tu nacieras: fueron canal de la Conciencia Divina. Por aquello debes respetarlos: algo tienen que te es necesario, si no tu espiritu hubiera elegido otros ovarios y otro semen gestador para encarnarse. Aunque creas despreciarlos, no debes eliminarlos sino absorberlos. Oculto, en el fondo de sus inconsciente, guardan para ti un tesoro. Un legado negativo puede transformarse en positivo… Haz dos plantillas de cuero, que meterás en tus zapatos. En la que se apoya la planta de tu pie izquierdo escribe: PE… Y en la plantilla que va en el zapato derecho, escribe DRO. Así, marcharás 40 días sobre tu ex nombre, absorbiendo la energía que te transmite desde el pasado. Luego esas plantillas se las envías por correo a tus padres acompañadas de una caja de monedas de chocolate.