El propio camino es la meta

El propio camino es la meta

No te obsesiones con la mirada puesta en la meta, porque te pasaran inadvertidas puertas o ventanas que se abran a nuevas posibilidades o senderos secundarios que resulten un buen atajo. Y recuerda que el propio camino es la meta, ya que la que te habías marcado tal vez solo sea una ilusión.

Juan Trigo

Fuente: El paraíso está en el fondo de tu corazón