En el futuro, los edificios no sólo tienen que ser más abiertos y flexibles, también hay que crear espacios verdes en los propios edificios donde poder desarrollar una comunidad. La naturaleza en las ciudades debe adquirir un valor social e incluso espiritual.
Un arquitecto chino que ha triunfado en Occidente…, el camino suele ser a la inversa.
Nos presentamos a más de cien concursos internacionales hasta ganar el de las torres residenciales en Mississagua (Canadá). Las Absolute Towers (2012), galardonadas como el mejor edificio alto en las Américas.
¿Qué tiene de especial?
Su forma es orgánica, sin ángulos rectos. Cada planta tiene una gran terraza y el edificio se retuerce de manera que los balcones se abren al cielo, a la luz y al sol.
Una altura humana.
Estoy construyendo en Nankín un edificio de 30 plantas. Cada tres plantas hay un jardín y un atrio. Los ascensores sólo paran en los jardines, de manera que tienes la sensación de que el edificio sólo tiene tres plantas.
En Roma estamos reconstruyendo un edificio en el centro histórico y nos han exigido que el 40% sea zona verde, un requisito que debería exigirse en todo edificio de nueva construcción porque los jardines pueden ser verticales y deben convertirse en arte.
Entiendo.
Quiero combinar la densidad de la ciudad y todos los elementos modernos, con bellos paisajes dentro de la ciudad que deben convivir con la arquitectura. Creo que las ciudades se van a planificar de una forma muy poética: serán verdes y poéticas.
Fuente: Extracto de una entrevista con Ma Yansong, considerado uno de los arquitectos jóvenes más influyentes, en La Vanguardia
